Las primeras pruebas para el cierre del subterráneo del Oleza comenzaron ayer
Las pruebas para ver cómo rueda el tráfico por Orihuela tras el corte de la salida del subterráneo de la CV-95 dieron comienzo ayer. Trabajadores de la empresa Sacyr, encargada de la construcción de la plataforma del AVE, procedieron al cierre sobre las once de la mañana. La Policía Local estuvo controlando el tráfico, para posteriormente realizar un informe con el que valoraran cuáles son los perjuicios que se ocasionan, además de informar a los vehículos de las vías que podían tomar como alternativa al subterráneo. La prueba durará tres días, en la que los agentes tomarán notas de todo lo que ocurra.
Los principales problemas que sucedieron en la mañana de ayer fueron en la Avenida Príncipe de Asturias, por la que los vehículos deben acceder a Obispo Rocamora o bien al cruce de Duque de Tamames por José Ávila. Ante el corte del subterráneo se ha cambiado el sentido al único carril practicable de la CV-930, la carretera que va paralela a la vía y que une esta zona con la Ronda de Orihuela en dirección a la autovía A-7.
Las pruebas se realizan con el objetivo de evaluar el impacto de esta medida, sin renunciar a la construcción de una circunvalación que pase por detrás del Thader y los supermercados Consum y Lidl, para canalizar la circulación.