Ángel Fenoll asegura que en Proambiente la actividad que él desarrollaba no ha tenido ninguna irregularidad, confirmando que cada socio ha trabajado y tomado decisiones en distintas parcelas. En el comunicado que ha relatado dice que el trabajo diario de la planta ha sido responsabilidad de sus hermanos Francisco, José, Antonio y su cuñado Juan Sarrias, mientras que el encargado de la gestión económica era Ramón.
A Ramón le dio poderes el empresario el 11 de junio del 2007, tras su detención en el marco de la Operación ‘Brugal’. Según Ángel Fenoll:
Siendo él a partir de esa fecha quien prácticamente gestiona en su conjunto toda la empresa, manteniéndome formalmente en el cargo a causa de los acontecimientos que estaban acaeciendo con las administraciones, incluida la de Justicia.
En la nota también habla del trabajo de sus sobrinos Javier, José y Ginés, incorporados en distintos campos a la gestión de Proambiente, y por último a Antonio Joaquín, a quien la junta de accionistas nombró administrador único el pasado 18 de diciembre. Ángel culpa a este último de prohibirle el paso a las instalaciones, ya que solicitó información acerca de quién había ordenado los vertidos fuera del vaso que conllevaron la suspensión de la autorización del vaso 3 y la apertura del expediente.
En el comunicado el empresario recuerda que las instalaciones de Proambiente se encuentran en fincas de su propiedad, en Abanilla y La Murada.
