Sobre la cuestión del traslado del mercado de Los Huertos, por Marta Guillén

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El concejal Dámaso Aparicio ha aparecido en prensa comunicando las decisiones que se han tomado hasta ahora en relación a los mercados de Orihuela y pedanías. Así hemos sabido que, pese al malestar que manifiestan algunos mercaderes con respecto a la ubicación del mercado de los Huertos, de momento se descarta totalmente su traslado al centro de la ciudad.

El colectivo de mercaderes ha denunciado en múltiples ocasiones que el mercado de los martes no funciona correctamente en su ubicación actual. Desde su traslado al recinto de los huertos ha sufrido un grave proceso de degradación que queda reflejado en el abandono de hasta 80 puestos por no proporcionar suficiente rentabilidad económica. Su situación periférica y poco accesible ha provocado una disminución de la afluencia de usuarios. Las características del espacio, abierto y desprotegido; el gasto municipal adicional que supone el alquiler de la parcela que ocupa, que es de titularidad privada; la inevitable inequidad en el reparto de los puestos, ya que aquéllos situados en los puntos de acceso venden más; o incluso la desarticulación espacial que provoca la ausencia de los puestos abandonados nos parecen motivos técnicos suficientes como para que se reconsidere la posibilidad de su reubicación. La reestructuración interna de los puestos ha sido la única propuesta del concejal para resolver la situación, y no da respuesta a ninguno de los problemas expuestos.

Por otra parte, cada vez que se ha anunciado desde el Ayuntamiento la intención de dar una respuesta a las reclamaciones de los mercaderes, que permitan la sostenibilidad económica del tradicional mercado de Orihuela, se ha producido un rechazo explícito por parte de asociaciones de vecinos e incluso de comerciantes. Durante un largo periodo de tiempo se han valorado distintas opciones: desde su reubicación en el lugar que ocupaba originalmente (el barrio de las Monserratinas) hasta su traslado a otras zonas del núcleo urbano, como el parque de la Ocarasa. Comprendemos que cualquier decisión al respecto comportaría ventajas y perjuicios a vecinos y comerciantes, que también deben ser consideradas.

La realidad es que se está produciendo un conflicto. Existe una demanda clara y justificada por parte de un colectivo (los mercaderes) que afecta los intereses -igualmente importantes- de vecinos y comerciantes del municipio de Orihuela, allí donde se propone la reubicación del mercado. La solución no consiste en ignorar sistemáticamente las reivindicaciones legítimas de un sector de la sociedad, obviando completamente el problema, ni en tomar una decisión unilateral e imponerla sin considerar los inconvenientes que pueda producir.

Desde Cambiemos Orihuela consideramos que este conflicto puede convertirse en un espacio de oportunidad para que los agentes sociales implicados participen activamente en la búsqueda de soluciones junto a técnicos y políticos. Proponemos que para resolver el problema se impulse la creación de mesas de negociación colectiva, en las que puedan participar públicamente todas las asociaciones y grupos que se vean afectados por esta cuestión. De esta forma se podría desarrollar un proceso de diálogo entre mercaderes, vecinos y comerciantes, con el objetivo de intercambiar y compartir las necesidades y las perspectivas de cada colectivo implicado, para así poder llegar a un acuerdo equilibrado que se genere desde el respeto a los intereses de cada una de las partes. Una solución transparente y consensuada que garantice la continuidad de un mercado que ya se había convertido en una tradición de nuestra ciudad y que respete al mismo tiempo el bienestar de los vecinos afectados.

Marta Guillén
Cambiemos Orihuela

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